
La participación de las mujeres en los campos de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (STEM) ha sido objeto de atención y análisis en las últimas décadas. A pesar de los avances, persisten desafíos que requieren estrategias integrales para fomentar una mayor inclusión y equidad en estos ámbitos.
En el ámbito educativo, las mujeres han incrementado su presencia en disciplinas STEM, aunque de manera desigual. Por ejemplo, en España, solo el 16% de los profesionales en el área de STEM son mujeres, y su interés en cursar carreras tecnológicas es significativamente bajo.
En el sector laboral, las mujeres ocupan aproximadamente el 40% de los cargos directivos en empresas medianas, reflejando avances hacia la paridad. Sin embargo, su representación disminuye en roles de mayor responsabilidad, como consejeras delegadas, y en sectores estratégicos.
Un estudio reciente destaca la deserción de mujeres en carreras científicas; después de 19 años de publicar su primer artículo, solo el 26% de las investigadoras continuaron con sus carreras, en comparación con el 36% de los hombres.
En los próximos 10 años se espera que la participación femenina en STEM aumente, impulsada por iniciativas educativas y políticas de inclusión. Organizaciones como Girls Who Code y Stemettes trabajan activamente para inspirar y apoyar a jóvenes en estos campos.
Además, programas gubernamentales y de organizaciones no lucrativas, como 500 Women Scientists, buscan aumentar la representación femenina en la ciencia y promover políticas inclusivas.
Sin embargo, quizás uno de los principales retos que enfrenta nuestra sociedad es normalizar la presencia y participación de las mujeres en los campos STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas). Solo cuando esta integración sea natural y común, podremos considerar que hemos alcanzado una verdadera igualdad de oportunidades en estos ámbitos.
Diversas iniciativas están trabajando para superar las barreras que impiden una mayor inclusión femenina en STEM. Por ejemplo, la Escuela de Pequeñ@s Científic@s Espiciencia en Burgos promueve vocaciones científicas desde temprana edad, utilizando metodologías colaborativas y proyectos que evidencian la relevancia de la ciencia en la vida diaria.
Además, la creación de espacios como la Escuela Municipal de Mujer y Ciencia Ciudadana en Salamanca busca inspirar y proporcionar ideas prácticas a las mujeres participantes, organizando conferencias y mesas redondas con investigadoras destacadas. Esta iniciativa destaca la importancia de las mujeres en los avances científicos de la ciudad y promueve oportunidades en I+D+i.
Asimismo, entidades como la Asociación de Mujeres Investigadoras y Tecnólogas (AMIT) promueven el acceso igualitario de las mujeres a la actividad investigadora en todas las ramas del conocimiento y en el sector tecnológico, organizando actividades como el "Girl's Day" para sensibilizar y fomentar vocaciones científicas y técnicas entre las jóvenes.
La creación del Observatorio Mujeres, Ciencia e Innovación refleja el compromiso institucional con la igualdad de género en el ámbito científico, tecnológico y universitario, trabajando para romper el "techo de cristal" que limita la promoción de mujeres en estos campos.
Estas iniciativas, junto con políticas públicas enfocadas en la igualdad de oportunidades y la promoción de la participación femenina en STEM, son fundamentales para lograr una sociedad en la que la presencia de mujeres en estos campos sea la norma y no la excepción.
¿Qué puedes hacer como orientadora?
Para fomentar una mayor participación de las chicas en STEM, pueden explorar algunas de las siguientes estrategias:
Referentes y promoción de modelos a seguir: La visibilidad de mujeres exitosas en STEM puede inspirar a jóvenes a seguir estas carreras.
Intervenciones educativas tempranas: Programas que abordan estereotipos de género y fomentan habilidades en matemáticas y ciencias desde la infancia pueden aumentar el interés y la confianza de las niñas en estos campos.
Redes de apoyo y mentoría: Establecer comunidades y programas de mentoría, como MentorSET, proporciona a las mujeres en STEM el apoyo necesario para avanzar en sus carreras.
Visibilización de contribuciones femeninas: Destacar y reconocer los logros de las mujeres en ciencia y tecnología, a través de eventos y publicaciones, puede aumentar su visibilidad y servir de inspiración para futuras generaciones.
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El estudio Zeno Quantum del pasado curso 23-24 mostró que, del total de estudiantes que utilizaron MeOrienta, un 49,74% de las estudiantes se decidieron por carreras STEM. Matizar que, en la realización de nuestros estudios, siempre extraemos Ciencias de la Salud, al ser una rama profesional a la que la mujer desde hace años accede sin diferenciación respecto a los hombres.
Las orientadoras y estudiantes de MeOrienta también disponen de MeAdvisor, un módulo incluido en MeOrienta que permite a las estudiantes conectarse con mentoras profesionales para conocer de primera mano la profesión antes de elegir los estudios superiores.
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En el comprosmiso que tenemos en Zeno Quantum con la igualad de las personas, el texto está redactado en género masculino ya que la RAE mantiene que el masculino genérico se usa para ambos sexos y que no excluye a la mujer.